Puerto Rico

Origen

Antes de la llegada de los españoles, Borinquen, nombre indígena de la isla, estaba poblada por los taínos. Cristóbal Colón la descubrió en su segundo viaje, el 19 de noviembre de 1493, y la bautizó con el nombre de San Juan Bautista. La isla empezó a conocerse con el nombre de Puerto Rico a partir de 1521, después de la fundación de la ciudad de Puerto Rico (hoy la ciudad de San Juan) que dio el nombre a la isla. En 1509 el conquistador Juan Ponce de León fundó el primer establecimiento español, Villa Caparra, llamada después ciudad de Puerto Rico, y se convirtió en su primer gobernador.


Constitución

El Estado Libre Asociado de Puerto Rico se rige por la Constitución vigente de 1952, que regula la vida política puertorriqueña. Esta Constitución ha sido sometida a enmiendas que no pueden entrar en conflicto con la Constitución de Estados Unidos que para ser efectivas deben ser aprobadas en referéndum. Los puertorriqueños comparten la mayor parte de los derechos y obligaciones del resto de ciudadanos de Estados Unidos; sin embargo, no pueden votar en las elecciones presidenciales, aunque tampoco tienen que pagar los impuestos federales que gravan la renta, excepto los funcionarios y los miembros de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos.


Gobierno

El poder ejecutivo de Puerto Rico recae en un gobernador, elegido democráticamente para un período de cuatro años, y que puede ser reelegido un número ilimitado de veces. El secretario de Estado sucede al gobernador si este último renuncia, muere o es destituido de su cargo. El gobernador es auxiliado en sus funciones por un gabinete de secretarios (ministros). El poder legislativo recae en una Asamblea Legislativa bicameral formada por un Senado y una Cámara de Representantes.


Historia General

La antigua Borinquen es la menor de las Antillas Mayores y, posiblemente, la menos conocida de todas. Puede llegar a través de cruceros y aeropuertos. Por su atractiva belleza y su posición estratégica, los españoles la convirtieron en un enclave envidiado y codiciado a lo largo de los siglos. Puerto Rico no es hoy un país, sino un Estado Libre Asociado de los Estados Unidos, y que proclama su bilingüismo y el eclecticismo cultural como señas de identidad. Existe un Puerto Rico colonial e histórico y un Puerto Rico natural. Puede disfrutar de infinidad de entretenimientos, centros de animación, comprar en sus centros comerciales o tiendas pero también puede conocer un país cosmopolita que combina autopistas, acueductos, hoteles de lujo y una activa vida nocturna, con la cultura y el folklore que manifiesta su herencia histórica. Encantadoras ciudades y pueblos como San Juan, la capital y el Viejo San Juan -la zona colonial-, Ponce, San Germán, Cabo Rojo, Mayaguez, Arecibo, Fajardo se encuentran en este país. En ellos puede recorrer sus calles y visitar sus catedrales, conventos y fortalezas, remotos faros y desconocidas reservas naturales. Posee una costa repartida entre el Atlántico y el Caribe con 438 km de playas bordeadas de palmeras o de frondosos manglares, en los que se pueden practicar todo tipo de deportes acuáticos. Las playas públicas, también llamadas "balnearios", son una buena oferta, siendo las más populares las de Luquillo y Vega Baja, en las cercanías de San Juan; y una Cordillera Central cubierta de bosques tropicales y surcada por caminos que llevan a fabulosos y ocultos parajes.