1995El huracán Luis, con vientos de hasta 190 km/h azotó la isla de San Martín; en esa ocasión murieron nueve personas y entre 7 000 y 10 000 perdieron sus hogares. En Anguila causó grandes estragos al sector agrícola. En Antigua y Barbuda provocó daños por 300 millones de dólares; el gobierno instituyó un programa de austeridad para contrarrestar los daños causados por los huracanes a la economía. En San Cristóbal y Nevis los huracanes Luis y Marilyn causaron daños por más de 70 millones de dólares.