El cono mantiene desde horas muy tempranas un promedio de 14 explosiones por hora y una pluma de ceniza a cuatro mil 800 metros sobre el nivel del mar que se dispersa hacia el oeste y suroeste, según la fuente.
También genera retumbos moderados y fuertes, y ondas de choque que hacen vibrar techos y ventanas de casas a 10 kilómetros de distancia.
Otro comportamiento fuera de lo habitual es un flujo de lava de 400 metros en las barrancas Ceniza, Taniluya y Santa Teresa, así como caída de ceniza sobre las aldeas Sangre de Cristo, Morelia, Santa Sofía y San Pedro Yepocapa.
El Insivumeh pidió a la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred), implementar el estado de alerta que considere necesario y estar pendiente del desarrollo de la actividad volcánica.
La Conred confirmó que las comunidades tienen sus rutas de evacuación ante cualquier emergencia o incremento violento que genere el volcán de Fuego, además de dar a conocer los boletines del Insivumeh a líderes comunitarios y autoridades locales. (Tomado de Agencia Prensa Latina)
De ocurrir una nueva erupción, sería la cuarta de este año.
El 3 de junio pasado, Guatemala vivió uno de los episodios más trágicos en la historia reciente del cono, cuando arrasó con comunidades enteras y dejó al menos 190 muertos, 200 desaparecidos y más de 1,7 millones de afectados en los departamentos de Escuintla, Sacatepéquez y Chimaltenango.