Barbuda debido a que posee abundante arena blanca la exporta a otros países.
El rey Felipe II ordena que el tráfico marítimo entre las posesiones españolas de América y la metrópoli se haga en convoyes, por temor a los ataques de corsarios y piratas. Dispone, además, de que La Habana se tuviera como punto de reunión de estas flotas, lo que provocó el establecimiento de nuevas rutas marítimas y mayor seguridad en su puerto.
Barbuda debido a que posee abundante arena blanca la exporta a otros países.