Rodeado por verdes colinas y grandes pinares que exaltan la belleza natural, se encuentra a 26 kilómetros al oriente de Tegucigalpa el pequeño poblado de Valle de Ángeles. Es el sitio ideal para realizar paseos campestres, donde se respira el aire puro que emana de los frondosos árboles que forman tupidos bosques de coníferas. Valle de Ángeles se caracteriza por la fabricación de productos artesanales de fino acabado, en los que la huella de mano hondureña se manifiesta en lo estético y útil de los mismos. A parte de esto, a poca distancia del pueblo se localiza el Parque Nacional Turístico de Valle de Ángeles, en el que niños y adultos se divierten al máximo, bañándose en las piscinas, jugando en las canchas deportivas o simplemente admirando el paisaje. Posee además, cafetería donde se ofrece comida tradicional, champas adecuadas con fogones para quienes gusten preparar sus alimentos y extensas áreas verdes. Con esmerada dedicación se preparan deliciosos platillos basados en carne asada, frijoles fritos, queso, plátano frito y picante chimol, también se sirven pupusas, yuca con chicharrón y variedad de jugos naturales. Los autobuses que conducen hasta este encantador valle, parten desde Tegucigalpa cada 30 minutos.