La línea costera de Barbuda es suave y se caracteriza por sus rosadas, blancas y arenosas playas protegidas por barreras de arrecifes y se extienden a lo largo de diez millas al suroeste. Estas playas, en los fines de semana, se pueblan de nativos, quienes hacen picnic y pescan, cocinan y pasan el día disfrutando del mar. En algunas áreas se encuentran cuevas, las personas acampan por algunas noches, pescan y cocinan ciervos, peces y tortugas, que pueden ser capturadas por cualquiera, especialmente los visitantes. En Two Foot Bay y otras áreas de la isla existen cavernas que no han sido exploradas; en algunas hay pinturas rupestres, en otras es posible escalar hasta alcanzar su punto más alto y existen cavernas que permiten ir hacia subterráneos y bajo el agua, lo cual requiere del conocimiento de expertos para realizar esta actividad. Muy cerca de Highland está Darby Cave Sinkhole, un enorme hueco en la tierra y lugar donde la copa de altos árboles quedan al nivel de los ojos pues es una asombrosa depresión natural. También podemos encontrar muchas ruinas o huellas de los diferentes períodos históricos. Experimentados guías pueden conducirle a estas ruinas y hay que ser cauteloso ya que muchas están bajo el agua, en sitios peligrosos, pero puede adquirir el equipamiento necesario para el buceo. Muchos pescadores y mujeres en la isla le brindan la posibilidad de ir a pescar, capturar langostas que resulta relativamente fácil, ya que abundan y pueden cogerse con la mano o con artes de pesca especiales. Una de las principales atracciones turísticas es el Magnificiente Santuario del Frigate Bird situado en el Codrington Lagoon.